Myriam Vázquez: “A mi padre le encantaba tenernos por el medio mientras trabajaba”

19 Feb Myriam Vázquez: “A mi padre le encantaba tenernos por el medio mientras trabajaba”

Buena parte de los recuerdos que Myriam Vázquez, Directora Gerente del grupo “Bodegas Gallegas”,  tiene de su infancia están relacionados con el mundo del vino. Hemos hablado con ella para que nos cuente algunos, para conocer de cerca su trabajo y rememorar la figura de su padre, fundador del grupo bodeguero. Va a ser un año de emociones. 

-Recuerdas aquél momento en el que probaste el vino por primera vez?

-Uy, pues mentiría si digo que me acuerdo! Seguro que siendo muy pequeña en el laboratorio de mi padre en Bodegas Arnoya, le encantaba tenernos por el medio mientras trabajaba.

-Cuéntanos el mejor recuerdo que tienes de tu infancia relacionado con la bodega.

-Cuando íbamos a ver a mi padre a Bodegas Arnoya, los sábados. Él estaba trabajando y mi hermano y yo jugábamos corriendo entre los depósitos mientras mi madre se ponía nerviosísima por si nos caíamos dentro; eran depósitos de hormigón en el suelo, no como ahora.

-Tu padre, Manuel Vázquez, fue el responsable de poner en marcha el negocio. ¿De qué manera os convenció para que os involucrarais en él?

-Bueno, más que convencernos es que no había otra alternativa! Yo quería ser veterinaria y cuando lo decía en la mesa mientras comíamos él me miraba muy serio y no decía nada… Con eso me bastaba para entender que me tenía que olvidar de la idea.

-Hoy los vinos de Bodegas Gallegas están presentes en los cinco continentes. No es fácil, suponemos…

-No, desde luego, ha sido un camino lento y con muchas meteduras de pata hasta llegar hasta hoy, que estamos presentes en ya 50 países. Es un área del negocio que se ha hecho desde cero y sin contar con ayuda externa, pero eso ha permitido que sea como un hijo, al principio no sabe ni andar y ahora es el hermano mayor que sirve de ejemplo a los demás.

-Hace un año estabas entre las homenajeadas por la Xunta en el evento “Con mujeres, hay Galicia”. Destacaban a emprendedoras gallegas que innovan desde la tradición. Es difícil ser mujer, dirigir un grupo bodeguero y no morir en el intento?

-Bueno… salvo para llevar tacones, para todo lo demás es más difícil ser mujer que hombre. El mundo, en general, sigue siendo un patriarcado y cuando una mujer lleva la voz cantante tiene que pasar por alto muchos prejuicios. Ya sabes: si un hombre ejerce poder, es poderoso, si lo hace una mujer, es mandona, pero creo que como todo, hay que saber sacar la parte buena de las cosas. Yo creo que nosotras somos unas líderes fantásticas, porque como somos multitarea, al trabajar con equipos de personas solemos llevarlos con mucha mano izquierda.

-Para acabar, una difícil: si tuvieras que llevarte uno de nuestros vinos a una isla desierta, cúal escogerías?

-Uy! Me llevaría sin duda la Edición Limitada Barrica Rectoral de Amandi, que hemos hecho en recuerdo a mi padre. Este vino, que lleva su nombre, “Manolo Arnoya”, es un vino de carácter gallego porque es 100% Mencía, además tiene la nota especial y singular que le da el haber estado en barrica.